viernes, 19 de septiembre de 2014

SO LONG, MARIANNE by Leonard Cohen

Incluida como corte 1 de la cara B del álbum de debut del cantautor canadiense Songs of Leonard Cohen en 1967, la canción habla de la relación que mantuvo con Marianne Ihlen a quien conoció en la paradisíaca isla griega de Hydra en 1960.

Conocerás a un hombre que habla con lengua de oro, le vaticinó su abuela a Marianne como una profecía. Todo comenzó cuando en 1960, el por entonces todavía desconocido cantautor canadiense desembarcó en la isla griega de Hydra con su guitarra, su ya famosa gabardina azul y su eterna Olivetti verde, ávido de experiencias, historias y sensaciones con los que alimentar sus poemas y canciones. Marianne y esa Olivetti fueron inmortalizadas en la contraportada del álbum de 1969 Songs From A Room.
Contraportada álbum Songs from A Room
Su primer encuentro fue en la terraza de una tienda de comestibles en el muelle y ahí el cantautor la invitó por primera vez a su mesa. Ella había llegado hacia tres años a la isla junto con su  marido Alex Jensen, pero la relación se truncó y éste acabo fugándose con otra mujer por lo que podemos decir que ella era una mujer libre. Ella convivía con su hijo Alex y juntos iniciaron una relación que duró aproximadamente siete años aunque de forma intermitente. Cohen afirmó que instalado en la casa de Marianne consiguió una paz insólita para el hasta el momento. Escuchaba mucho a Ray Charles y solía escribir en la terraza de la casa a primera hora de la mañana. Eran un pareja muy alejada del hippismo de la época. Eran ordenados, metódicos, rutinarios, ...los dos éramos anticuados, en cuanto a que teníamos un sentido muy asceta y ordenado de la vida... La relación tuvo numerosos altibajos debido en gran parte a la necesidad del Cohen de salir en busca de afiliaciones neuróticas en palabras de la propia Marianne.

En la isla de Hydra, Cohen finalmente vivió su verdadera transición hacia la música. Cohen tenía 33 años cuando decidió dedicarse a la música. En algunas declaraciones de Marianne, desde hacía años le venía confesando que quería convertirse en cantautor. En declaraciones del propio artista, se había dado cuenta que no podía procurar su sustento con su trabajo como autor, y mantener su estilo de vida. Escribir sus volúmenes de poesía y, por otro lado, sus novelas, lo dejaban agotado creativamente. Después de escribir Beatiful Losers, su segunda novela, tuvo que ser hospitalizado después de algunos abusos de speed y hachís, y unos 10 días de ayuno. Escribir canciones era más ligero, no perdía su poesía, y podía, simplemente, tener dinero de forma más rápida. La cultura hippy convirtió a la música en un gran medio transmisor de la cultura que al final acabó atrapando al canadiense. Decidieron mudarse a la multicultural New York y concrétamente al mítico Chelsea Hotel. 

Cohen & Alex Jensen hijo
El nombre original de la canción era Come on Marianne. Cuando comenzó a escribir el tema, la relación ya estaba muy deteriorada y de hecho el texto tiene unos claros tintes amargos. La joven la interpretó como un venga! intentémoslo otra vez! Pero un año más tarde, en el estudio de grabación, el músico dudaba sobre las dos palabras que variaban el significado de la canción-—optó por so long, hasta pronto, en inglés—. Yo no pensaba que estuviera diciendo adiós, pero supongo que era así, afirmó mas adelante, por lo que mas que de una canción de amor podemos decir que se trata de un tema de despedida, melancólico y triste. Marianne siempre ha afirmado que aunque la canción llevara su nombre, no era con la que mas se identificaba o mas cercana se sintiera. Siempre prefirió Bird on a wire, ...Recuerdo aquella mañana cuando al abrir la ventana nos encontramos que habían puesto el cableado del teléfono...

Podría considerarse que aunque hubo muchas e importantes mujeres en la vida de Leonard Cohen como la inmortal Suzanne Verdal que dio nombre a quizás su mayor éxito (Suzanne), Cohen encontró a Marianne en un momento crucial de su carrera y fue su sostén y quien le dio el coraje necesario para no abandonar en un momento muy delicado del artista ...Creo que le di coraje para escribir y no tirar la toalla...


Quizá para algunas personas sea un poco difícil la música de Cohen cuando no se está familiarizado a escucharlo, pero en cuanto pasa el tiempo empieza a cobrar sentido. Su estilo peculiar, voz ronca o aguda, aunado a su sentir melancólico en sus temas, termina por atraernos tarde o temprano. 





So Long Marianne, Studio Version

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